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ORIGEN DE LOS DICCIONARIOS
Por Veronica Juarez
Seguramente muchos recordarán
con terror las clases de bibliotecología (ahora no recuerdo la materia
específica) donde nos ponían a estudiar los niveles de los documentos y donde
poco hablábamos de la historia de las distintas obras (esa era harina de otro
costal, o de otra materia). Pues sí, aunque les parezca extraño los
bibliotecarios clasificamos la información no sólo por materia, sino hasta por
nivel de documento: están los documentos primarios, los secundarios y
un tercer tipo, conocidos como obras de consulta o referencia. Ya
en otro momento les explicaré en qué consiste cada nivel de documento y antes
de que se me vayan aburridos a leer otra cosa, sólo les diré que dentro de las
obras de consulta entran los diccionarios y, como a mi me gusta esto
de la historia de la bibliotecología y todo lo que tenga que ver con los
libros, el día de hoy toca el turno en este post al origen de los diccionarios.
Aunque nadie ha logrado
ponerse de acuerdo, se cree que los primeros diccionarios surgieron en
Mesopotamia por allá del 2,300 a.C., según la Wikipedia, se han
descubierto textos cuneiformes que pertenecieron a la famosísima Biblioteca de
Asurbanipal y que describían palabras sumerias. Interesante saber que ya desde
los orígenes de la escritura, se escribiera sobre las palabras mismas. En fin,
esto fue hace miles de años; sin embargo, el diccionario como lo conocemos hoy
en día es un tanto más reciente.
En la Grecia clásica también
podemos encontrar rastros de los primeros diccionarios, el filólogo y poeta
griego, Filetas, realizó en el siglo IV a.C un compendio con el vocabulario mas
complicado en la obra de Homero. Ya para el primer siglo de nuestra era, el
gramático Apolonio realizó un Léxico Homérico.
En la Edad Media es posible
encontrar los primeros glosarios especializados en distintos temas. Pero el
término diccionario lo debemos al inglés John de Garland que en
1220 escribió un libro de ayuda para la dicción latina, de ahí el términodiccionario;
aunque el trabajo de de Garland no fuera propiamente un diccionario, sino una
ayuda para la pronunciación de las palabras de origen latino.
Como dato curioso, esos
fósiles de diccionarios eran generalmente bilingües y eran utilizados para
ayudar a traducir de una lengua a otra, por ejemplo, en 1552 apareció el Anglicum
Latinum. Lo mismo ocurrió con los primeros diccionarios publicados en el
México Colonial, aunque estos tuvieron fin evangelizador, es decir, para poder
convertir a los antiguos pobladores de México fue necesario comenzar a
hablarles en su propia lengua. El primer diccionario aparecido en México (y de
paso en la América Conquistada) fue el Vocabulario en lengua castellana y
mexicana que Fray Alonso de Molina escribió entre 1555 y 1571, a partir de
1571 incluyó uno en español-náhuatl. Después de este le seguirían otros pero el
de Molina es un obligado en estos temas.
En cuanto a la lengua
inglesa, el primer diccionario de que se tiene conocimiento fue la Table
Alphabetical publicado por Robert Cawdrey en 1604, es un compendio de
términos poco usuales de la lengua inglesa como To concruciate que es
algo así como atormentar. Al diccionario de Cawdrey seguirían muchos
otros; el primero que incluyó en el título la palabra diccionario fue The
English Dictionaire, conocido también como An interpreter of hard
english words de Henry Cockeram publicado en 1623. Los diccionarios en
inglés más famosos son el Johnson Dictionary publicado en abril de
1755 y el imprescindible Oxford English Dictionary publicado 173 años
después. Este último, por cierto, con un origen peculiar y bastante sangriento.
Y desde luego, no podemos
dejar de lado a la lengua española, con el primerDiccionario de la lengua
castellana compuesto por la Real Academia Española y publicado en 1780, el
antecedente del DRAE que uilizamos en la actualidad incluso para consulta en
línea. Cosa curiosa que la Real Academia surgiera hasta 1713 y publicara un
diccionario de nuestra lengua casi 7 décadas después de fundación y
aproximadamente 7 siglos después de los primeros vestigios de la lengua
española.
Referencias:
Forsyth, Mark. The
etymologicon: a circular stroll through the hidden connections of the English
Language. USA : Totem Books, 2011.
Prieto, Carlos. 5000
años de palabras. México : FCE, 2006.
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